Probablemente es una de las cuestiones que más come el coco a muchos responsables de Recursos Humanos. Queremos que los empleados se sientan a gusto y den lo máximo de sí. No obstante, existen muchos factores que debemos tener en cuenta para lograr este objetivo y es muy fácil que alguno se nos pase por alto o que, aun considerándolo, no le estemos prestando la atención suficiente.

¿Cuáles son los valores, misión y visión de la empresa?

El primer paso más básico y fundamental es tener estos aspectos definidos, claros y absolutamente integrados. Si el empleado no sabe qué es lo que aspira a lograr la empresa en el largo plazo (visión),  a qué se dedica y por qué esto es importante (misión), y cuáles son los principios en los que la empresa cree y por los cuáles se va a guiar en la toma de decisiones (valores); entonces el empleado, como individuo que forma parte de un ente al que le falta claridad en estos aspectos, no podrá ofrecer su mejor versión al faltarle también claridad sobre las razones por las cuáles él es una pieza importante dentro del puzzle. ¿Cómo sabrá si está tomando las decisiones correctas? ¿Cómo podrá sentir que está progresando y contribuyendo a mejorar la empresa?

El roce hace el cariño

Todos los seres humanos tenemos la necesidad de sentirnos conectados con los demás y percibir que estamos progresando. Cuánto más tiempo compartan los miembros del equipo entre ellos en un ambiente relajado dónde puedan tanto reflexionar sobre los progresos en el trabajo cómo conversar sobre lo qué han hecho el fin de semana, sus gustos, aficiones, etc. mayor será la confianza que se establezca entre ellos, y este aspecto es clave para reforzar la vinculación y compromiso con la empresa.

Haz que se sientan importantes, más que tus clientes

Realmente, si tenemos empleados es porque son necesarios para poder incrementar y mantener nuestra base de clientes. Por lo tanto, sin empleados no hay clientes. Su importancia y relevancia tan fundamental es algo de lo que en muchas ocasiones ni siquiera ellos son conscientes. Es una importante labor de la empresa hacérselo ver en el día a día para que ellos sientan y no tengan ninguna duda de que se espera de ellos grandes cosas precisamente porque son importantes. Fijar ese estándar y alta expectativa, como ya nos dice el tan conocido efecto Pigmalión (se refiere a la potencial influencia que ejerce la creencia de una persona en el rendimiento de otra), redundará en una mayor dedicación y rendimiento de nuestro equipo.

Ofréceles lo mejor que puedas

¿Qué les ofrecemos y con qué actitud a las personas importantes de nuestra vida? Lo mejor, ¿verdad? Pues no deberíamos quedarnos atrás ni guardarnos nada que esté en nuestra mano cuándo se trata de nuestros empleados si ya nos hemos convencido de lo relevante que es su papel en la empresa. Cuándo verdaderamente la compañía se esfuerza por ofrecerles lo mejor que puede a nivel de beneficios sociales, remuneración e incentivos, responsabilidad, plan de carrera, crecimiento profesional y personal…todo esto le va a ser devuelto en compromiso y vinculación y, por ende, en un mayor rendimiento e incremento de la cuenta de resultados.

Haz de su paso por la oficina una experiencia agradable

¿Qué emociones te genera el acudir a un lugar dónde viviste experiencias desagradables? ¿Verdad que no eres capaz de dar tu mejor versión en ese mismo ambiente? Básicamente tu cerebro ha asociado una mala experiencia a ese lugar y volver hace que nos genere emociones negativas, las cuáles nos conducen a acciones muy alejadas de lo que se puede considerar un rendimiento aceptable.

Sin embargo, ¿qué ocurre cuándo vamos a sitios que nos han producido tanta felicidad y emociones positivas? Pues que estamos deseando volver y, una vez allí, la alegría y vitalidad que nos genera un ambiente de tan buena vibración nos llevan a un nivel de rendimiento muy alto.

Pre-ocúpate por su salud y bienestar

Sin salud no hay nada más. Nuestra mejor versión de rendimiento a nivel laboral no puede llegar desde una mala salud. Si no nos sentimos bien no podemos actuar bien, es así de sencillo. La salud de todo tu equipo es fundamental, y es nuestra labor tanto ocuparnos de que estén saludables y se sientan bien como de preocuparnos. Ocuparnos implica tomar medidas para facilitar y promover hábitos saludables dentro del espacio de trabajo y preocuparnos conlleva transmitirles que su salud es importante para nosotros y nos ayuda también a reforzar el punto anterior “Haz que se sientan importantes”.

El café como aliado para obtener el máximo rendimiento de nuestro equipo

En conCAFÉ ayudamos a reforzar en buena parte la mayoría de estos aspectos que hemos comentado para lograr la máxima involucración del equipo. Elevamos los estándares de calidad y sostenibilidad del café a otro nivel respecto a un servicio de vending, el café encapsulado o cualquier formato de una cafetería tradicional gracias al café de especialidad y máquinas de café de alta gama suizas. Esta combinación permite lograr un sabor único con tan sólo pulsar un botón y sin necesidad de contar con un barista, el experto en elaborar el café que encontramos dentro de cafeterías especializadas. Es posible de esta manera disfrutar en la oficina de manera muy sencilla un café recién molido, ecológico y con leche natural, que no es necesario endulzar en exceso con aditivos y que se distingue por su sabor más afrutado y achocolatado, dejando un regusto agradable en boca que contrasta con el fuerte amargor habitual de los cafés comerciales, así como contribuir a la propia salud y a un impacto social positivo gracias a los procesos de agricultura sostenible y eliminación de los residuos que genera el café encapsulado.


Nuestro Servicio de Café OCS